Ahorrar es más fácil cuando se tiene un plan: siga estos pasos para crearlo.
A veces, lo más difícil de ahorrar es empezar. Esta guía paso a paso puede ayudarte a desarrollar una estrategia sencilla y realista, para que puedas ahorrar para todos tus objetivos a corto y largo plazo.
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El primer paso para empezar a ahorrar es saber cuánto gastas. Lleva un registro de todos tus gastos, es decir, de todos los cafés, artículos del hogar y propinas en efectivo, así como de las facturas mensuales habituales. Registra tus gastos de la manera que te resulte más fácil: con lápiz y papel, con una simple hoja de cálculo o con una aplicación o un rastreador de gastos online gratuito. Una vez que tengas los datos, organiza las cifras por categorías, como la gasolina, los alimentos y la hipoteca, y suma cada cantidad. Utiliza los extractos de tu tarjeta de crédito y del banco para asegurarte de que lo has incluido todo.
Ahora que sabes lo que gastas en un mes, puedes empezar a crear un presupuesto. Su presupuesto debe mostrar cuáles son tus gastos en relación con tus ingresos, de modo que puedas planificar tus gastos y limitar los excesos. Asegúrate de tener en cuenta los gastos que se producen regularmente pero no todos los meses, como el mantenimiento del coche. Incluye una categoría de ahorro en tu presupuesto y trata de ahorrar una cantidad que te resulte cómoda al principio. Piensa en aumentar tus ahorros hasta un 15 o 20 por ciento de tus ingresos.
Si no puedes ahorrar todo lo que te gustaría, quizá sea el momento de recortar gastos. Identifica los gastos no esenciales, como el ocio y las salidas a cenar, en los que puedes gastar menos. Busca también formas de ahorrar en tus gastos mensuales fijos, como el seguro del coche o el plan de telefonía móvil. Otras ideas para recortar los gastos cotidianos son
Utiliza recursos, como los listados de eventos de la comunidad, para encontrar actividades de ocio gratuitas o de bajo coste.
Cancela las suscripciones y membresías que no utilizas, especialmente si se renuevan automáticamente.
Planea comer la mayor parte de tus comidas en casa, e investiga las ofertas de los restaurantes locales para las noches en que quiera darse un gusto.
Cuando te sientas tentado por una compra no esencial, espera unos días. Puede que te des cuenta de que el artículo era algo que deseabas en lugar de necesitarlo, y podrás desarrollar un plan para ahorrar para ello.
Una de las mejores maneras de ahorrar dinero es fijarse un objetivo. Empieza por pensar para qué quieres ahorrar, tanto a corto plazo (de uno a tres años) como a largo plazo (cuatro o más años). A continuación, calcula cuánto dinero necesitarás y cuánto tiempo te llevará ahorrarlo.
Objetivos comunes a corto plazo: Fondo de emergencia (de tres a nueve meses de gastos de manutención), vacaciones o pago inicial de un coche
Objetivos habituales a largo plazo: El pago inicial de una casa o un proyecto de remodelación, la educación de tus hijos o la jubilación
Después de los gastos y los ingresos, es probable que tus objetivos sean los que más influyan en la asignación de tus ahorros. Por ejemplo, si sabes que vas a necesitar sustituir tu coche en un futuro próximo, podrías empezar a ahorrar dinero para uno ahora. Pero asegúrate de recordar los objetivos a largo plazo: es importante que la planificación de la jubilación no quede relegada a las necesidades a corto plazo. Aprender a priorizar tus objetivos de ahorro puede darte una idea clara de cómo asignar tus ahorros.
Hay muchas cuentas de ahorro e inversión adecuadas para los objetivos a corto y largo plazo. Y no tienes por qué elegir sólo una. Analiza detenidamente todas las opciones y ten en cuenta los saldos mínimos, las comisiones, los tipos de interés, el riesgo y el plazo en el que necesitarás el dinero para poder elegir la combinación que mejor te ayude a ahorrar para tus objetivos.
Casi todos los bancos ofrecen transferencias automáticas entre tus cuentas corrientes y de ahorro. Puedes elegir cuándo, cuánto y dónde transferir el dinero o incluso dividir tu depósito directo para que una parte de cada cheque de pago vaya directamente a tu cuenta de ahorros.
Revisa tu presupuesto y comprueba tu progreso cada mes. Eso te ayudará no sólo a ceñirte a tu plan de ahorro personal, sino también a identificar y solucionar rápidamente los problemas. Entender cómo ahorrar dinero puede incluso inspirarte a encontrar más formas de ahorrar y alcanzar tus objetivos más rápidamente.